Las barras más 'salvajes' de Madrid
De sobra son conocidos los aires y los modos de los viejos camareros madrileños (digamos que seco, cuanto menos). Y existe una serie de tabernas, céntricas todas ellas, que han hecho de su ultrajante trato al cliente santo y seña de la casa. Populares, castizas, con alma, no suelen estar vacías (más bien todo lo contrario) y, en muchas ocasiones, terminan convirtiéndose en nuestras direcciones favoritas para ir a tomar una caña, un vermú de aperitivo o una racioncita de lo que se tercie. Por eso hemos decidido recopilar algunas en esta ruta de tascas únicas e insuperables que, con cariño, solemos llamar la ruta gastromasoquista.