MATA HARI BAILARINA Y ¿ESPÍA? | NG Historia
Mata Hari, la historia trágica de una mujer no tan fatal
El término Mata Hari se ha convertido en sinónimo de espía seductora y de mujer fatal. En realidad Margaretha Zelle, como así se llamaba, poco tuvo que ver con el espionaje y se convirtió en una víctima de su propia fama.
©Rue des Archives/PVDE / Cordon Press
Margaretha Geertruida Zelle, más conocida por su nombre artístico Mata Hari, ha sido identificada durante más de un siglo como la “mujer fatal” por excelencia. Pero esta bailarina neerlandesa tuvo en realidad una vida muy desgraciada: casada con un hombre que la maltrataba, se hizo pasar por una princesa de Java y se labró una carrera como bailarina erótica, convirtiéndose después en una cortesana de la élite europea. Sus vida terminó bruscamente cuando, tras aceptar encargos de espionaje por necesidad económica, fue acusada de ser una agente doble y fusilada por los franceses en 1917.
LA TRAMPA DEL AMOR
Margaretha nació el 7 de agosto de 1876 en Leeuwarden (Países Bajos) en el seno de una familia medianamente bienestante, al menos lo suficiente para enviarla a estudiar a una escuela privada de magisterio. Entrada en la adolescencia su belleza empezó a procurarle problemas: el director de la escuela comenzó a flirtear con ella y, aunque no está claro si ella llegó a involucrarse o si fue víctima de acoso, el resultado fue que su padrino y tutor decidió sacarla de la institución.
Para leer el articulo de Abel G.M., seguir enlace. https://historia.nationalgeographic.com.es/a/mata-hari-historia-tragica-mujer-no-tan-fatal_17293