Muerte en el camino
El Camino de Santiago no es una nación pero tiene algo de hermandad secreta, quien lo hizo sabe cosas que solo puede compartir con otras personas que lo hayan andado
Fuese porque la investigación se llevó a medias entre dos cuerpos de seguridad distintos o por lo que fuese, ese caso no pide una felicitación al Ministerio sino una explicación
Camino de Santiago
Hace años escribí un libro sobre el Camino de Santiago, guiado por un fotógrafo, Xurxo Lobato, y descubrí lo que es entrar en un tiempo y un lugar distinto que no es fácil de decir. El Camino de Santiago no es una nación pero tiene algo de hermandad secreta, quien lo hizo sabe cosas que solo puede compartir con otras personas que lo hayan andado, de modo que la muerte de una mujer norteamericana asesinada en un punto de una ruta afecta a la opinión pública en general, pero afecta de un modo más cercano a quienes sienten el Camino como algo propio. Al cabo es un lugar por donde han pasado la mayoría.
El ministro de Interior se retrató con los investigadores y se felicitó a si mismo por lo bien que se había hecho la investigación del asesinato, pero hay cosas en esa investigación que no se comprenden. En esa zona del camino francés tan despoblada no hay vecinos desconocidos y cualquier incidente se sabe, y se habían denunciado hurtos y molestias a peregrinos. Esas cosas las sabe la policía de proximidad en el rural, que en España es la Guardia Civil. Es comprensible que si el sospechoso detenido desapareció al cabo de un mes hayan tardado cuatro meses en interrogarlo, pero es muy difícil de comprender que en el primer mes no lo hayan hecho. El resultado es que se tardó cuatro meses en detener e interrogar a una de las personas que estaban ahí delante y que, en la lógica más pedestre, había que investigar en primer lugar. ¿Cómo se explica?
Para leer el resto del articulo Suso de Toro (*), seguir este enlace. http://www.eldiario.es/zonacritica/Muerte-camino_6_431566854.html
(*) Suso de Toro Santos, licenciado en Geografía e Historia en la Universidad de Santiago de Compostela, es autor de Otra idea de España y Siete palabras, entre otras novelas. Su obra Trece campanadas ha sido llevada al cine. Ha obtenido el Premio Nacional de Narrativa en el año 2003.