Ruta de los faros de Bretaña (I)
De los 150 faros que hay en Francia, 82 están en Bretaña. Y no por capricho: las costas bretonas son una trampa mortal para los barcos. Por su ubicación es una ruta frecuentada desde los albores de la navegación por infinidad de buques; sin embargo el litoral está lleno de islas, islotes, acantilados, bajos, puntas rocosas y corrientes traicioneras. La mezcla perfecta para construir grandes historias en tono a naufragios y epopeyas marítimas. Si te gustan tanto como a mi los faros y te sientes atraído por los parajes solitarios donde se levantan, no te pierdas esta ruta por los faros de Bretaña. Aquí va la primera entrega:
Si hablamos de los faros del Finisterre, la primera parada tiene que ser obligatoriamente la isla de Oussant. Aunque este trozo de tierra plana en la que viven unas 500 personas de forma permanente está a solo 20 kilómetros de la costa continental bretona, es una de la islas de más difícil acceso porque está rodeada por corrientes marinas que parecen ríos y por bajos y roquedos que son una trampa mortal para las naves. Por eso en tan reducido espacio de tierra emergida hay nada menos que cinco faros, dos en la costa y tres de mar.
Para leer el resto del articulo de Paco Nadal (*), seguir este enlace. http://blogs.elpais.com/paco-nadal/2015/04/ruta-faros-bretana-francia-.html#more
(*) Paco Nadal es viajero-turista antes que periodista y culo inquieto desde que tiene uso de razón. Estudió Ciencias Químicas pero acabó recorriendo el mundo con una cámara y contándolo. Escribe en EL PAÍS sobre viajes y turismo desde el año 1992. Es también escritor y fotógrafo, colabora con la Cadena Ser, además de presentar series documentales en diversas televisiones.